sábado, 27 de septiembre de 2008

Reseña Chaitén

Reseña Chaitén

La madrugada del 2 de mayo cambió de forma radical la vida de los habitantes de Chaitén, una pequeña ciudad ubicada en la provincia de Palena. El volcán que lleva el mismo nombre del poblado, hizo erupción con una inusitada magnitud, obligando a las autoridades de gobierno a efectuar una evacuación forzosa para a todos los pobladores, tanto del Chaitén urbano como de las inmediaciones rurales.

La diáspora comenzó en la mañana y tarde del mismo 2 de mayo, sin considerar a la gente que por el temor a los temblores (y previendo lo que más tarde se materializó en una realidad) abandonó prematuramente la zona. La enrome cantidad de población fue reubicada en distintas zonas de la X región y de la XIV. Este asentamiento de emergencia planteó un desafío a los chaiteninos disgregados; intentar insertarse en un medio ajeno a su realidad cotidiana, alejado de su tierra, de sus casas y, muchas veces, de los familiares y los grupos de afinidad.

Los tres meses y fracción que separan la fecha del éxodo con el presente plantean una serie de complicaciones que no han sido solucionadas y que lejos de mitigarse con el paso de los días, se hacen cada vez más complejas y, por consiguiente, necesarias de solucionar. El problema del desarraigo, las separaciones y la incertidumbre son realidades presentes en los discursos y en los dolores de estos habitantes, por tanto, hay que procurar generar medios paliativos para intervenir estas situaciones. El programa “Creando Chile en mi barrio”, dependiente del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, ha incluido a Chaitén dentro de uno de los barrios a trabajar para el año 2008. Esta iniciativa estaba planteada antes que sucediese el desastre desencadenado por la erupción del Chaitén, pero que por motivos de la compleja situación derivada del desplazamiento, aplazó su aplicación para el mes de agosto pasado.

La idea central del programa es incentivar la generación de la gestión y materialización de actividades artístico-culturales tendientes a la mejora de las condiciones de socio-culturales de algunos barrios determinados, todo bajo la lógica de que las artes y la cultura en general proponen el trabajo y desarrollo de sensibilidades que no han sido tradicionalmente incluidas dentro de los proyectos de crecimiento y mejora de las ciudades, comunas ni barrios. Si bien la selección de Chaitén estuvo motivada más por su condición de aislamiento geográfico que por su vulnerabilidad social, es un hecho de que estas personas necesitan del desarrollo de políticas innovadoras en el plano de la cultura, a saber de que su lejana ubicación los ha mantenido fuertemente alejados y “excluidos” de las itinerancias artísticas, haciéndose necesario, ahora más que nunca, que el arte (con todas sus líneas de desarrollo) y la cultura (en toda la magnitud de la definición) intervengan de forma activa en la mejora de la situación que afecta a los chaiteninos desplazados, permitiéndoles sobrellevar de forma más plena su estado de desplazados y, más tarde, su estado de aislamiento geográfico.


Grupo de trabajo Chaitén
Animadores culturales-Chaitén